Su nombre es Tangara Multicolor, mide aproximadamente 13
centímetros y al igual que el famoso bichofue, esta pequeña ave de colores
vibrantes es tan caleña como Cristo Rey. Sin embargo el deterioro de su
ecosistema tiene en grave amenaza de extinción a esta poca conocida especie. La
cuenca alta del río Cali es el nido que la ve nacer y pese a que también habita
en las cordilleras central y occidental del país, es una especie visible
especialmente en los corregimientos de Pichindé, Felidia, El Saladito, La
Leonera y Los Andes del Parque Nacional Natural Farallones de Cali. De hecho,
según los expertos en fauna aviaria, la Tangara Multicolor se puede observar
fácilmente en los bosques del kilómetro 18.
Los colores brillantes de sus alas, que llegan a medir
hasta siete centímetros de largo cada una y su agudo silbido, se suman a su
temperamento calmado. Suele tejer su nido en forma de cono con varios
materiales vegetales y pone entre dos y cuatro huevos que incuba por 15 días.
Pese a ser un ave muy llamativa por su plumaje de tonos amarillos, verdes y
azules, en Cali en general es desconocida. En la región no hay suficiente
investigación sobre el ave y no se conocen datos fiables sobre la cantidad de
individuos que existen en la actualidad. Pero la experiencia de los
observadores advierte que hay una evidente disminución de la especie. En
cambio, existe en otros países un especial interés en la observación de aves y
conocer la Tangara Multicolor suele ser uno de los motivos por el que varios
conocedores de la fauna aviaria deciden visitar Cali. Sin embargo, esta linda
ave caleña está duramente amenazada por la erradicación de su ecosistema y la
afectación que ha sufrido la cuenca alta del río que abastece a más de 600 mil
caleños. El experto Wagner señaló que un gran porcentaje de los bosques
originales en los que vivía han desaparecido, y a eso se suma la minería
ilegal, la explotación agrícola y ganadera, y el fomento de la construcción de
viviendas en zonas de reserva forestal. De hecho en una reciente visita de la
Personería Municipal al Parque Nacional Farallones de Cali, se constató que más
de 120 familias han edificado en áreas de reserva forestal protegida de los
corregimientos de Andes, Pichindé y Pance, situación que impacta en la vida de
este pájaro y en otras 300 especies de aves que residen en este ecosistema. El tráfico
animal es otra de las amenazas a su existencia. Según Carlos Andrés Galvis,
biólogo del Zoológico de Cali, por ser una especie poco conocida no es tan
apetecida en el mercado, pero sí hay una gran demanda de loros y pericos. En
contraste, El País pudo conocer que a través de páginas web para comprar aves
ornamentales se puede conseguir en Cali una pareja de Tangaras Multicolor hasta
por $300 mil, en comparación con una pareja de pericos australianos que se
consigue hasta por $22 mil. Incluso los comerciantes pueden conseguir por $350
mil Tangaras Sangre Toro, variante de la especie que habita en bosques de
Bogotá, de plumajes negros y rojos. La cifras de la CVC indican que durante el
primer semestre del 2014 han sido atendidas 119 aves incautadas del tráfico
animal (también se atendieron 156 reptiles y 42 mamíferos).
La importancia de la conservación de la Tangara
Multicolor y de las demás especies de aves que habitan en Cali y sus
alrededores, está en el nivel de calidad del entorno en el que vivimos. Según
indica Galvis, las aves y otras especies de fauna están donde pueden vivir,
reproducirse y alimentarse, por eso el interés en preservar su territorio.
Además de la Tangara Multicolor, se encuentran en vía de extinción el Pato
Colorado, la Pava Caucana, el Búho Mochuelo Ecuatoriano, todos habitantes de
los bosques de los Farallones. En Colombia son más de 63 especies de aves las
que se encuentran amenazadas. Si bien es cierto que la implementación de
políticas claras contra los agresores del medio ambiente ayudarían a evitar el
terrible panorama de la fauna silvestre, los expertos indican que acciones
ciudadanas simples como ahorrar agua, sembrar árboles y ser responsables en los
niveles de consumo de los recursos naturales, contribuyen con la preservación
de este ecosistema y por ende en la conservación de la riqueza natural con el
que cuenta la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario